Hace mucho tiempo alguien me dijo: Somos las vidas que tocamos, somos las vidas que nos tocan. En su momento no comprendía lo que querían decir. Con el paso del tiempo vas descubriendo que hay personas especiales, personas mágicas con un propósito significativo en la vida de alguien.
Samantha sin duda es de esas personas especiales que cambian las vidas de las personas que la rodean. Siempre con una sonrisa, con un pensamiento positivo, una palabra de aliento, con ganas de vivir y de disfrutar a sus seres queridos. Casi podría jurar que siempre hay una canción en su mente, es una chica que ama la música y no pierde oportunidad de cantar cuando el momento lo amerita.
Sam visitó mi estudio y tuvimos la oportunidad de generar ésta serie de fotografías que comparto con ustedes. Ella es energía viva y cuenta con una luz muy bonita que contagia. Lo que nos permitió hacer una serie que me gusta mucho, que tiene mucho de ella y de su esencia.
Gracias Sam, por la buena vibra y las sonrisas.